a Hola a todos:
La Guerra en Ucrania es ya una dramática realidad tras el ataque del ejército ruso al país decretado por el autócrata Validimir Putin.
Un ataque a la democracia, al sistema de libertades y a la libertad de un pueblo por parte de un dirigente al frente de un Estado que históricamente ha tendido a la expansión bajo diferentes modelos (zares, dictadura comunista o democracia fallida). Todos con un denominador común, la expansión como única manera de defender el espacio propio ya de por sí muy extenso.
Y la geografía tiene en esta visión del mundo propia de la clase dirigente rusa bastante que decir. Resulta aquí relevante reseñar el artículo que al respecto de la influencia de la Geografía en las relaciones internacionales publicado en su día en esta web.
Para comprender la expansión de Rusia como Estado, os recomendamos el siguiente post, con un repaso general pero muy comprensible del crecimiento territorial fulgurante de Rusia en la historia.
Son muchos los conflictos que dejó tras de sí la Unión Soviética: Crimea, Ucrania, Chechenia, Trasnistria… Quedaron “helados”, tal y como repasábamos en este artículo. Pero han ido reapareciendo, como es el caso de Nagorno Karabaj, del que también hablamos en este post de 2020.
Andrez Castaño publicaba en Geografía Infinita hace ya unos años, en 2014, un artículo sobre el espacio vital y Rusia en el que argumentaba la anexión de Crimea bajo esa óptica. La teoría del espacio vital de Ratzel sigue aplicando para la guerra de Ucrania actual.
Y hay países como Ucrania que sienten especialmente sobre sí ese ansia expansionista y esa amenaza constante. Países que un momento o en otro han formado parte del sistema político y el área de influencia rusa. Es el caso de los países bálticos, con sus estrechas fronteras, que vivieron también bajo el yugo soviético y de los que hablamos en este artículo.
No en vano, Rusia siempre ha sido presentada a lo largo de la historia como amenazante en los mapas satíricos. Esta poderosa herramienta de propaganda política presentó siempre en el siglo XIX a Rusia de modo amenazante. No es de sorprender que hoy en día los mismos patrones se repitan a manos de un dirigente autocrático que repite la historia.
Solo queda esperar a una rápida resolución de esta cruel guerra, con una defensa férrea de los países democráticos de nuestro sistema de libertades ante una amenaza clara: la extensión de un modelo autoritario que hoy en el mundo representan Rusia y también China.
Desde estas líneas todo nuestro apoyo al pueblo de Ucrania.
#StopWar #StandwithUkraine
Geografía Infinita